Muchas veces, lo más importante al comienzo de un curso es captar la atención de los alumnos para que de una forma u otra se puedan interesar por el módulo, y más siendo uno como Empresa e Iniciativa Emprendedora.
Este año que comienza, 2021, después de un un largo periodo de pandemia, se me ocurrió empezar el curso lanzando una pregunta.....¿Alguna vez habéis estado enamorado?.
- Buenas días, después de las presentaciones vamos a comenzar con la clase, a ver.... como empanzaría yo a explicar esto?- preguntaba mientras me atusaba la barba, intentando buscar la pregunta adecuada.
-¡Empieza como todos los años!- se oyó una voz de entre los alumnos.
- ¡No puedo!, este año es diferente, quiero cambiar todo. - Contesté- Ya sé como empezar....- afirmé mientras los alumnos apagaban el murmullo que se había empezado a formar- ¿Alguna vez habéis estado enamorado?.
Los alumnos se miraban unos a otros y sonreían entre ellos, pero nadie se pronunciaba, nadie era capaz de contestar en publico. Así que contesté yo por ellos.
- ¡Yo si!, he estado enamorado y estoy enamorado, es una sensación muy placentera y te sientes muy bien.... - Mirando para arriba me acordé de mi padre- Recuerdo, -Continúe- cuando mi padre me decía, " primero yo, luego yo y después yo" y le decía, pero Papá eso es muy egoísta si siempre está pensado en ti, deberías pensar en los demás. Hoy me doy cuenta que que tenía más razón que un santo.
Antes de dar a los demás, -seguí diciendo- debemos aprender a valorarnos a nosotros mismos, cultivar el primer amor, el amor hacia nosotros mismos. Cuando hacemos eso, nuestra energía positiva se eleva, nuestra estructural emocional se cimienta de forma adecuada y se va llenando correctamente nuestro yo interior. Cuando nuestro interior está lleno de esta energía positiva podemos proyectar esta energía positiva, que podemos llamar amor hacia el exterior y focalizarlo hacia una persona concreta, y de esta forma enamorarnos. Nos enamoramos por tanto debido a esa proyección a que nuestro interior está lleno de energía positiva. ¿Habéis entendido esto?- Terminé preguntado.
- Si, lo hemos entendido y tienes razón- contestó un alumno del fondo.
- Genial, muy bien- afirmé yo- ¿Tenéis alguna pregunta?
- No, nos ha quedado claro. contestó otro alumno.
- Sé que por vuestra cabeza os está rondando una pregunta, pero creo que no os atrevéis a preguntar.
- ¿Has estudiado psicología?
- Esa no era la pregunta, pero no. No he estudiado psicología.- respondí- Venga. ¿No os parece raro que el profesor de empresa os este hablando del amor?, ¿Qué tendrá que ver con las finanzas?
- Bueno, si parece raro, yo me lo estaba preguntando- afirmó un alumno.
- Lo que os he explicado es un símil del mundo emocional y los vamos a exportar al mundo económico.-empecé diciendo-Nuestra proyección exterior en el mundo emocional es el enamoramiento, en el mundo económico esa proyección se puede concretar en el plan de empresa, pero esto es algo puntual, sería mejor proyectarlo mejor en una forma de vida, en alcanzar lo que se denomina la LIBERTAD FINANCIERA.
Para alcanzar esa libertad financiera nuestro yo interior económico debe de estar en un nivel adecuado de energía para poder proyectarse de forma adecuada al exterior, esto se consigue mediante ciertas herramientas financieras y conocimiento de como funciona el sistema. Lo que podríamos denominar las finanzas económicas y su aplicación personal.
-¿Ha quedado todo claro?- terminé diciendo.
- Si, lo hemos entendido pero... ¿Qué es la libertad financiera?- pregunto un alumno.
- Bueno, ese concepto, lo vamos a aprender más adelante. Pero la libertad financiera no se mide en el dinero que tiene, sino en tiempo; el tiempo que podemos seguir viviendo sin tener que preocuparnos de donde sale el dinero. Pero eso será en otra clase, lo que debe de quedar claro que debemos desarrollar nuestras herramientas y habilidades personales para proyectarla al exterior y alcanzar la libertad financiera.
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